Esta tarde, en la clínica del ISSSTE en Parral, se llevó a cabo una reunión sindical que expone de manera alarmante las problemáticas internas que afectan a los trabajadores de esta institución. En un ambiente de opacidad y favoritismos, se discutieron temas cruciales como el respeto a los derechos laborales, la asignación arbitraria de plazas y la exigencia de permisos económicos, prácticas que minan la confianza y la moral del personal.
Lamentablemente, se nos negó el acceso a la reunión, impidiendo que la voz de los trabajadores, quienes han manifestado sus inconformidades, fuera escuchada. Este hecho no solo es un ataque a la libertad de prensa, sino también una clara señal de que hay algo que ocultar. La petición del personal del hospital para que los medios desalojaran el área plantea serias dudas sobre la disposición del sindicato a abordar estas preocupaciones de manera abierta y responsable.
A pesar de la presencia de Nancy Ruvalcaba, líder del sindicato, quien se ha negado a proporcionar información sobre la situación actual, los trabajadores merecen respuestas claras y acciones efectivas. La falta de transparencia y la evasión del diálogo solo perpetúan un ambiente laboral tóxico y perjudican la calidad del servicio que se brinda a la ciudadanía.
Instamos a las autoridades y a la dirección del ISSSTE a tomar cartas en el asunto, a garantizar el respeto a los derechos de los trabajadores y a asegurar un proceso justo en la asignación de plazas, así como a atender de inmediato la exigencia de permisos económicos. La salud y el bienestar de los empleados deben ser una prioridad, y solo a través de un diálogo abierto y honesto se podrán resolver las problemáticas actuales.
Es tiempo de actuar y se exigen respuestas y soluciones, no más silencio ni favoritismos.
