Familias rarámuri viven bajo un clima de miedo y tensión en el municipio de Guachochi, Chihuahua, donde desde hace tres meses grupos de hombres armados, vestidos con ropa tipo militar han tomado control de viviendas, tierras y animales en diversas rancherías ubicadas entre Choguita y Norogachi.
De acuerdo con una denuncia recopilada por la Consultoría Técnica Comunitaria A.C. (Contec), que brinda acompañamiento a las comunidades, los habitantes reportan que los grupos armados irrumpen en los hogares, roban alimentos, obligan a las mujeres a preparar tortillas y se llevan todo lo que encuentran a su paso.
En este periodo, una persona habría sido asesinada tras intentar oponerse a los agresores, lo que ha incrementado el terror entre las familias.
Mujeres, niñas y niños permanecen en constante riesgo mientras los hombres armados instalan campamentos en la zona y se desplazan con total impunidad entre las rancherías rarámuri.
Las denuncias se han realizado de manera anónima debido al temor a represalias. Por ello, las comunidades exigen la intervención urgente de las autoridades de los tres niveles de gobierno, así como rondines permanentes, presencia militar y medidas inmediatas de protección para las familias indígenas que hoy viven bajo amenaza





